Obbatalá es descendiente directo de Olodumare (Dios) y sus hijos son personas calmadas, reservadas y de mucha confianza. Sus ideas son llevadas hasta el fin, aunque todas las personas se muestren contrarias a sus opiniones y proyectos. Les gusta dominar y liderar a las personas.

Un hijo de Obbatalá también es muy caprichoso y dedicado. Mantiene todo muy limpio con cariño y belleza. Son personas muy respetuosas y exigen recibir el mismo respeto. Poseen una gran voluntad, por lo que a veces son considerados como personas tercas.