Obatala Oguiniyán es otro camino masculino de Obbatalá. Oguiniyan terminó el asiento del mundo por orden de su padre Oshagriñán. Este orisha se entrega como complemento de su padre y va en un güiro pequeño, que debe pintarse de blanco. Lleva una sola piedra y un gallo de plomo, una cadena de plata con una mano de caracoles enganchada. El güiro se debe forrar con algodón. Obbatalá Oguiniyán no deja ver su cara y come gallo. Entre los arará se le conoce como Awémayú.